Especial Piqué y sus líos

  

GABINETE DE ANÁLISIS Y SEGUIMIENTO  DE LOS LÍOS DE ALTOS CARGOS

Parte 1: Un centenar de facinerosos se personan en el supuesto alzamiento de bienes de nuestro Portavoz

Medio centenar de afectados del 'caso Ercros' piden más acciones al Supremo

Medio centenar de social comunistas y polanquistas disfrazados de particulares y de empresas han presentado un escrito ante la Fiscalía del Tribunal Supremo -que investiga un supuesto delito de alzamiento de bienes en la empresa Ercros- para personarse en calidad de "perjudicados" en el caso. Quieren que abra nueva vías de investigación. Los afectados solicitan la devolución de 588 de los 632 millones que invirtieron en 1988. La investigación del caso Ercros, que supendió pagos cuando era su presidente nuestro por el momento ministro de Industria y asesor fiscal, D. Joseph $ Piqué, pasó al Supremo por la condición de aforado de éste. Según el escrito presentado ante la Fiscalía por el abogado social comunista José María Caparrós el pasado 22 de enero, los cincuenta afectados, entre los que figuran las empresas Arte Sa, Ribersol y Aseinver SA, invirtieron en 1988 un total de 632 millones de pesetas en un proyecto de cogeneración eléctrica de la empresa Unión Explosivos Río Tinto. Del total de la inversión, articulada en forma de letras de cambio libradas por la compañía F. F. Investment Co, los inversores sólo recuperaron 84 millones. Según los inversores, Unión Explosivos Río Tinto, tras su fusión con la empresa Cros (Ercros) y la constitución de la petrolera Ertoil, se descapitalizó. Ercros, recuerdan, vendió Ertoil a Cepsa por mediación de una sociedad luxemburguesa denominada General Mediterranean Holding (GMH) y otra francesa, Elf Aquitaine. Ertoil, afirman, era el único activo valioso de Ercros, que supendió pagos en 1993, cuando estaba presidida por el actual ministro de Industria y portavoz del Gobierno, Josep Piqué. El resultado fue que los inversores no recuperaron la mayor parte de la cantidad invertida pese a que reclamaron a las compañías implicadas en la operación: Ertoil, Cepsa y Ercros. El caso que afectaba a estos inversores dio lugar a un cruce de cartas entre Joseph $ Piqué y Eugenio Marín, consejero delegado de Cepsa, la compañía que adquirió Ertoil. Marín acusó a Ercros-Piqué de haber ocultado pasivos en la contabilidad de la compañía adquirida. En carta fechada el 11 de enero de 1994, Piqué contesta a Marín para negar la existencia de pasivos ocultos y afirmar que "todas las letras de cambio libradas por F. F. Investment, fueron atendidas por ERT/Ercros" hasta que la compañía suspendió pagos, momento en que se dejó de pagar "por imperativo legal" ya que la entidad libradora de las letras, la instrumental F. F. Investment, fue incluida en la lista de acreedores. En la misiva de Piqué a Marín se aclara que cualquier notificación debe dirigirse "a Javier de la Rosa Martí", nombrado representante de los intervinientes en la compra de Ertoil.


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