CASO AFINSA Y EL PP
Puro teatro
Los estafados de los
sellos piden el voto para el PP
Economía despachó el 'caso Afinsa'
en 2002 a instancias del fiscal sin adoptar medidas
La Fiscalía
General del Estado envió en el otoño de 2001 al Ministerio de Economía una
denuncia de un particular sobre Afinsa que en opinión del denunciante realizaba
"actividades encubiertas de depósitos de capital y rentabilidad que son propias
de una entidad financiera o bancaria, y no comercial". La Dirección General del
Tesoro solicitó al Servicio Jurídico del Estado un informe para conocer la
situación de las inversiones en sellos. El informe contemplaba una actuación
preventiva, discutible, del Banco de España, pero adjudicó la supervisión a
Sanidad y Consumo. Aun así no se reguló ni se adoptaron medidas.La denuncia fue
elevada al presidente del Tribunal de Cuentas, Ubaldo Nieto, en septiembre de
2001. Asimismo, la denuncia fue enviada a la Comisión Nacional del Mercado de
Valores (CNMV).En esas fechas, Gescartera acababa de ser intervenida y se
avecinaba el fraude del Banco Filatélico (Banfisa). El texto de la denuncia -un
folio- y la copia de un contrato de Afinsa con una clienta fueron remitidas por
la Fiscalía del Tribunal de Cuentas a la Fiscalía General del Estado. A su vez,
ésta última remitió los documentos a la Subsecretaría de Economía.El 18 de enero
de 2002, el Banco de España señalaba que "de entenderse que la operativa [de
Afinsa] está sujeta a supervisión, lo sería en el marco de las normas de
ordenación y disciplina del mercado de valores, y que de no considerarse la
actividad descrita como sujeta a competencias de la CNMV, la autoridad
competente para requerir información o inspeccionar Afinsa sería el Ministerio
de Economía el cual podría ejercer tales competencias por sí o a través del
Banco de España". Y añadía que "salvo que por ese ministerio se disponga el
ejercicio de esta última facultad, entendemos que no procede efectuar actuación
alguna por parte del Banco de España".Los servicios jurídicos de la CNMV, por su
parte, alegaron en su informe que la actividad de sellos no estaba sujeta a la
legislación del mercado de valores. "Aunque caben análisis de la posible
realidad económica encubierta tras esa apariencia contractual determinada
[operaciones de Afinsa], tienen escasa utilidad práctica, y sugieren una
operativa propia y típica de entidades de crédito". La CNMV, pues, hacía un pase
directo del balón al Banco de España.A la vista de ambas respuestas, la
Dirección General del Tesoro, a través de la Subsecretaría de Economía, solicitó
en marzo de 2002 un informe al Ministerio de Justicia, a cargo de Ángel Acebes,
para conocer "si la actividad que realiza la entidad Afinsa Bienes Tangibles
puede asociarse con la captación pública de ahorro, así como su posible sujeción
a la supervisión de la CNMV".El informe del abogado general del Estado, Arturo
García-Tizón López, de 1 de abril de 2002, admitía que "la actividad de Afinsa
entraña, desde la perspectiva exclusivamente económica que se considera, una
captación de ahorro del público". Pero al analizar la normativa, concluía que
"esa actividad no implica tal captación en el sentido a que se refiere la
normativa porque se rige la actividad financiera, que es la que se realiza a
través de actos y contratos del mercado de valores y de la función de
intermediación del crédito".Por tanto, ni la CNMV ni el Banco de España, según
el informe, debían supervisar la actividad. ¿Qué era, entonces, Afinsa? El
informe despacha el asunto así: "Siendo, en principio, una actividad lícita, si
bien carente de una regulación propia y específica, estando sometida a las
prescripciones del Código Civil y Código de Comercio sobre obligaciones y
contratos y a las previsiones de la ley 26 de 19 de julio de 1984, general para
la defensa de los consumidores y usuarios". Por tanto, el informe no adjudica a
Sanidad y Consumo la supervisión. Lo que dice es que no existe ninguna
regulación sobre la actividad y, en tal caso, rigen los preceptos para toda
actividad mercantil. Y reconoce: "Debe advertirse que no existe una previa
supervisión o control preventivo, desde la perspectiva a que atiende la ley
26/1984, de la actividad en cuestión por parte de la administración competente
en materia de protección de consumidores y usuarios".El abogado del Estado
considera la posibilidad de que el Banco de España actúe asumiendo que las
compraventas de sellos "sean operaciones simuladas que encubran operaciones
propias de las entidades de crédito". El informe decía que antes de actuar, el
Banco de España tendría necesidad, previamente, de una sentencia firme que
acreditara la simulación de los contratos. En esas condiciones, dice, cabría
entender la competencia, aunque matiza que se trata de un "criterio discutible".
Economía se cruzó de brazos. En estos cuatro meses de análisis, quebró, en enero
de 2002, el Banco Filatélico, y ADICAE presentó denuncia sobre Afinsa y Fórum
Filatélico el 1 de febrero de 2002 ante el Ministerio de Economía, la CNMV y el
Banco de España, sin éxito alguno. Más alarmas, imposible.
www.elpais.es 24.05.06
Hacienda detectó en 2003 compras de
sellos de escaso valor por 60 millones y su venta por 700
El informe de la
Agencia Tributaria sobre Afinsa, una de las dos sociedades de comercialización
de sellos intervenida judicialmente, destapa que las irregulares ventas de
timbres por parte del principal proveedor de esa empresa, Francisco Guijarro, se
conocieron a principios de 2003.
Guijarro, según
la investigación de la Agencia Tributaria, habría vendido hasta ese año a Afinsa
sellos de escaso valor por cerca de 60 millones de euros que, a su vez, Afinsa
había colocado a sus clientes por más de 700 millones de euros. La Agencia
Tributaria inició sus comprobaciones sobre esta operación el 12 de febrero de
2003 cuando comunicó a Afinsa que Guijarro, su principal proveedor, no
acreditaba documentalmente el origen de los sellos que vendía. Cuatro meses
después de esa fecha, en junio, Afinsa decide tomar las primeras medidas por
supuestos defectos en los sellos comprados a Guijarro y en julio cancela la
relación que mantenía con su principal proveedor y le reclama 900.000 euros por
"sellos inadecuados".
Las conclusiones
de la investigación de la Agencia Tributaria, resumidas en un informe fechado
hace 11 meses, fueron la base para la intervención de la Fiscalía
Anticorrupción, que concluyó con una querella presentada el 24 de abril de 2006.
Dos jueces de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz y Fernando Grande-Marlaska,
ordenaron tras esa iniciativa del fiscal la detención de nueve directivos de las
dos filatélicas intervenidas, Afinsa y Fórum, y su posterior encarcelamiento
hace 10 días. Desde entonces, 350.000 clientes de ambas empresas que habían
invertido sus ahorros en sellos con una garantía por escrito de que iban a
obtener en torno a un 6% de interés anual temen que no podrán recuperar su
dinero.
La investigación
de los inspectores fiscales, a la que ha tenido acceso EL PAÍS, destapó "la
existencia de un tráfico de sellos que Afinsa ha calificado de inadecuados para
la venta en los contratos de inversión". Afinsa compró esos sellos por 60
millones de euros y se los vendió a sus clientes por más de 700 millones de
euros. La Agencia Tributaria descubrió que el proveedor Francisco Guijarro no
pudo justificar documentalmente la compra de esos sellos ni el origen de los
mismos. Afinsa retiró los timbres inadecuados de los contratos con sus clientes
y revisó todo el proceso de compras de sus sellos, la principal materia prima
del negocio. Entre 1998 y 2003, Guijarro había sido su principal suministrador
de timbres.
La Agencia
Tributaria plantea en su informe que pese al engaño de Guijarro en la venta de
sellos por valor de 60 millones de euros a Afinsa, la empresa no hizo nada
contra su proveedor, lo que resultaría sospechoso. La filatélica explicó al juez
que había reclamado la devolución de la mercancía y abrió una investigación, que
encargó a una de las agencias de detectives privados más importantes en España,
para conocer el origen de los sellos que les había vendido Guijarro. Pero la
Agencia Tributaria mantiene en su informe que Afinsa inició por primera vez una
actuación por defectos en los sellos en junio de 2003, cuatro meses después de
que la inspección fiscal iniciara su trabajo de comprobación. La Agencia
Tributaria recuerda en su informe que Afinsa le remitió una nota en octubre de
2004 donde admitía que podían existir "sellos falsos o manipulados".
Además de las
relaciones con el supuesto defraudador fiscal Francisco Guijarro, la Agencia
Tributaria también analizó en su informe los contratos comerciales que Afinsa
suscribía con sus clientes: "Consisten en la captación de ahorro del público
realizada por la sociedad mediante unos contratos de venta de sellos de
inversión equivalentes a préstamos retribuidos". Esa definición conduce a la
Agencia Tributaria a considerar que Afinsa es un negocio de tipo financiero pese
a que los legisladores del Gobierno del PP habían excluido a esas empresas de la
exigente y rigurosa regulación correspondiente a las empresas que ofrecen
productos financieros. El fiscal, en la querella presentada contra Afinsa, sigue
la misma pauta: "El negocio debe calificarse de financiero por la certeza de la
revalorización pactada, cuya cuantía queda supeditada exclusivamente al tiempo
de duración del contrato y a un porcentaje anual sobre el capital, con total
independencia de las eventuales oscilaciones de valor de los sellos,
contingencia que, en caso de resultar adversa, tendría nulo efecto sobre su
cliente".
La visión de la
Fiscalía sobre las actividades de las filatélicas contrasta con la que tuvieron
los legisladores del PP, que a finales de 2003 regularon la actividad
desarrollada por Afinsa y Fórum dejando claro que se excluía a ambas empresas
del sector de los negocios financieros.
La inspectora de
la Agencia Tributaria encargada de la investigación de la actividad de Afinsa
también lleva la contraria a los legisladores del anterior y del actual Gobierno
cuando escribe en su informe: "La naturaleza financiera resulta evidente por la
cuantía de la revalorización que obtiene el inversor, que consiste siempre en un
tanto por ciento anual sobre el capital invertido, percibiendo incluso en forma
trimestral y anticipada la futura rentabilidad".
Con ese
convencimiento, la investigación de la Agencia Tributaria concluye que el
déficit patrimonial de la empresa es de 1.100 millones de euros de acuerdo a los
criterios contables que se aplicarían a cualquier negocio financiero y no
mercantil.
Los abogados de
Afinsa recuerdan que en múltiples actas de la Agencia Tributaria sobre los
rendimientos declarados por los clientes de la filatélica, esos beneficios
obtenidos por la inversión tienen la consideración de ganancias patrimoniales,
que son propias de los negocios mercantiles. Hacienda no considera esos
beneficios como rendimientos del capital mobiliario, como lo hace cuando se
trata de negocios financieros.
El director del
Servicio Jurídico de la Agencia Tributaria, en el informe elaborado con fecha 11
de julio de 2005, tiene claro que el proveedor Guijarro incurrió en un delito
contra la Hacienda Pública, pero en el caso de Afinsa rechaza que su conducta se
pudiera tipificar como estafa y ni siquiera como estafa en grado de tentativa:
"Aunque la
sensación de riesgo es elevada, resulta difícil tipificar los hechos descritos
como delito de estafa. Para justificar esta afirmación debe admitirse que los
hechos sólo serían constitutivos de un delito de estafa en grado de tentativa
(no existe consumación). Pero el artículo 16.1 del Código Penal dispone que 'hay
tentativa cuando el sujeto da principio a la ejecución del delito por hechos
exteriores, practicando todos o parte de los actos que objetivamente deberían
producir el resultado', y sin embargo éste no se produce por causas
independientes de la voluntad del autor". "En el caso examinado", continúa el
jefe jurídico de la Agencia Tributaria, "sería el propio autor del supuesto
delito al que hasta la fecha ha reintegrado las inversiones a sus cuentas o ha
encontrado nuevo comprador, por lo que difícilmente puede considerarse que
estemos ante un delito de estafa en grado de tentativa".
El jefe jurídico
de la Agencia Tributaria reconoce en el informe que es muy difícil tipificar
conductas como la de Afinsa, "que quizás se aparta de los principios de prudente
administración, evidenciando un riesgo, pero que no se materializan o
personifican en un concreto perjudicado". 25 años después de la creación de
Afinsa, con 150.000 clientes activos, 2.600 empleados, 150 delegaciones y una
facturación anual de 500 millones de euros, no existe ni un solo inversor que
haya dejado de cobrar lo establecido por contrato.
www.elpais.es 23.05.06
La
administración de Aznar recomendó invertir en Fórum y
Afinsa
Un artículo
publicado a finales de 2001 en el Boletín Económico
de ICE, editado por la Subdirección General de
Estudios sobre el Sector Exterior, recomendaba como
inversión segura, los sellos. Además, entre las empresas
filatélicas, destacó el Grupo Afinsa y Fórum Filatélico
porque garantizan, según se afirma en el artículo, “una
plusvalía mínima y el compromiso, bajo contrato, de
recompra”. Esta Subdirección estaba dirigida en aquel
momento por Juan Costa, quien poco después formaría
parte del Ejecutivo de Aznar como ministro de Ciencia y
Tecnología. La subdirección dependía de la Secretaría de
Estado de Comercio, dependiente a su vez de Rodrigo
Rato, entonces vicepresidente económico del Gobierno.
En el
artículo, escrito por Juan Emilio Aragonés Carazo, se
relata la historia del coleccionismo de sellos y el
desarrollo del comercio filatélico. Una parte esencial
es la que habla de “los sellos como inversión”. Aquí, se
defiende el valor de los sellos a la hora de invertir
dinero en ellos: “Al estar considerados como papel
moneda, los sellos tienen valor en sí mismos. Son
seguros y raramente dependen de tendencias (…) Los
sellos son bienes tangibles, muy bien considerados como
valores de inversión a medio y a largo plazo,
constituyendo el mejor valor-refugio para invertir y
aportando un valor añadido, como es el de invertir en
cultura”.
Rentabilidad media del 12%
Asimismo, comenta que “el mercado español de
sellos mueve cerca de 100.000 millones de pesetas
anuales y la rentabilidad media de este mercado se ha
situado en torno al 12% anual en los últimos
ejercicios”. Leyendo estas líneas, los afectos actuales
por el caso de Forum Filatélico y Afinsa poco podían
prever lo que les iba a ocurrir.
Y más
teniendo en cuenta que “España es uno de los países que
cuentan con mayor aceptación entre los coleccionistas de
todo el mundo”.
Afinsa y Fórum, empresas destacables
Aragonés explica en el artículo que “a
principios de los ochenta empezaron a surgir empresas
dedicadas a la inversión en bienes tangibles” y añade
que las “especializadas en el mercado filatélico,
proporcionan al inversor no especializado la base
teórica, ofreciéndole la compra de paquetes filatélicos
cuya revalorización está asegurada”. Y menciona a Afinsa
y Fórum Filatélico como empresas destacables.
Seguridad contra el fraude
Para el articulista, las empresas de inversión
filatélica “suponen, además de una garantía en
rentabilidad, una seguridad contra el fraude”.
Sistema rentable
Las conclusiones que aparecen en el texto, publicado
por una institución pública en la era Aznar, son la de
que “el coleccionismo de sellos es un sistema rentable
de ahorro e inversión, si bien es cierto que hay
diferencias importantes entre coleccionar sellos por
afición o invertir en sellos” y la de que “invertir en
sellos no requiere unos elevados gastos adicionales y se
basas en la adquisición de piezas ya cotizadas, cuya
revalorización es rápida”.
Lo cierto es
que ahora hay 350.000 personas preocupadas por la
posibilidad de perder sus ahorros invertidos en Forum
Filatélico y Afinsa.
www.elplural.com 19.05.06
Una enmienda de Pujalte excluyó a
empresas como Afinsa y Fórum del control del Banco de España
La Unión de Consumidores de España
ha pedido hoy explicaciones al PP sobre por qué cuando gobernaba en 2003 excluyó
a empresas como Afinsa y Fórum Filatélico del control financiero del Banco de
España y de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Fue una enmienda
presentada por el popular Vicente Martínez Pujalte la que posibilitó su
exclusión.
El portavoz de la
Unión de Consumidores de España, Dacio Alonso, presidente de esta asociación en
Asturias, indicó hoy en Oviedo que el PP, con mayoría absoluta en el Congreso,
"evitó a última" hora que empresas que vendían productos de bienes tangibles
como sellos u obras de arte fueran incluidas en el Ley 35/2003 de Instituciones
de Inversión Colectiva como entidades financieras. Recordó que una enmienda
presentada en el Senado "en el último momento" por el parlamentario popular
Vicente Martínez Pujalte posibilitó que su control lo ejercieran las oficinas de
consumo de las comunidades autónomas, "donde estarían más a gusto, ya que sabían
que no se las iba a controlar". "No digo que de ese hecho se deriven
responsabilidades patrimoniales por parte del Estado, ya que no hay una ley que
lo sustente, pero sí creo que hay una responsabilidad de naturaleza política",
aseveró. Para el portavoz de la UCE, "el PP debe explicar a las 350.000 familias
que siendo responsable de esa Ley y cuando se conocía que estas empresas tenían
una gran inseguridad jurídica, no provocó que fuesen consideradas instituciones
financieras y su actividad productos financieros". Argumentó que una de las
razones que podrían explicar el comportamiento del PP es que "conocía que la
Agencia Tributaria había abierto expedientes a estas empresas por
irregularidades en sus impuestos y que, por ello, no quiso incluirlas como
entidades financieras para evitar que el Estado se hiciera cargo de cualquier
responsabilidad". Aseguró que podría haber "una razón más preocupante" y apuntó
que quizá "pudo haber habido una presión por parte de estas empresas en el
Parlamento para que no se las considerase como entidades financieras".
www.cadenaser.es 15.05.06
El Gobierno del PP concedió a Afinsa
subvenciones por más de 80.000 euros
El Gobierno del
PP de José María Aznar concedió a Afinsa -una de las dos empresas intervenidas
por una presunta estafa a decenas de miles de clientes- subvenciones por más de
80.000 euros entre los años 1998 y 2003El Ejecutivo subvencionó en al menos
cuatro ocasiones a Afinsa, y lo hizo en concepto de formación continuada y
promoción del arte español. La primera de las ayudas aparece recogida en el
Boletín Oficial del Estado (BOE) de 19 de diciembre de 1998 y fue por importe de
7.200 euros. En el BOE de 12 agosto del año 2000 se recoge una ayuda de 13.522
euros concedida por la Dirección general de Bellas Artes. Además, el Estado
ayudó en 2002 con algo más de 30.000 euros por formación continuada. En el año
2003, por el mismo concepto, Afinsa recibió del Instituto Nacional de Empleo
(INEM) otros 33.000 euros. En total, las ayudas estatales recibidas por Afinsa
superan los 84.000 euros, según los datos facilitados a la Cadena SER por la
Unión de Consumidores de Palencia
www.cadenaser.es 15.05.06