CRISTINA GRAU
 ¿ Trabajo por amistad , benevolencia o buena vecindad  ?

En el mes de febrero de 2004 el periódico Levante-EMV publicó un articulo con el siguiente titular: “Zaplana tiene trabajando como asesora de prensa desde hace meses a una persona que cobra el paro”. El articulo explica que la asesora, Cristina Grau, se integró en el equipo de prensa por expreso deseo de Zaplana a finales del verano del 2003 meses después de cesar como jefa de prensa de la Conselleria de Cultura de la Generalitat Valenciana. y que tiene asignados medios del Ministerio (teléfono y correo electrónico). Grau consta en los registros del INEM cobrando regularmente la prestación económica por desempleo desde el mes de octubre del 2003, situación que se mantenía en el mes de febrero de 2004. 

Durante el mes de febrero de 2004 continúan apareciendo artículos en diversos periódicos (Levante-EMV, Las Provincias, El País) en los que se hacen eco del caso. En una nota oficial el Ministerio reconocía que “Dª Cristina Grau Navarro no tiene relación de ningún tipo, ni funcionarial ni laboral, con este Ministerio, y que, en consecuencia no percibe ninguna retribución”. Añadiendo que: “ Es cierto que ha colaborado de manera desinteresada y sin ser retribuida por ello, en determinados momentos, pero su colaboración siempre ha sido de forma desinteresada”. 

La jefa de prensa del Ministerio, Elena Sánchez, declaró que  facilitó infraestructura a la colaboradora de Zaplana a iniciativa propia, sin consultárselo al Ministro y sin pensar que cometiera ninguna irregularidad. 

Por último el entonces Ministro Zaplana en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros declaró que considera “correcta” “ y por lo tanto no existe ningún tipo de irregularidad” la situación de Cristina Grau y que colabora de “forma gratuita”. Días después el periódico Levante-EMV publicaba  que había sido “destituida sin estar contratada”. 

El 13/02/2004 nueve abogados, miembros del secretariado de la Asociación de Abogados Laboralistas de la Comunidad de Madrid, denunciaron ante la Inspección de Trabajo de centros regidos por la Administración del Estado, la que entienden como situación irregular de la periodista Cristina Grau Navarro. En nombre del Secretariado firman la denuncia José Ignacio Montejo y Manuel de la Rocha. 

Del 24 al 28 de mayo de 2004 se realizan diversas actuaciones por parte de la  Inspección General del Departamento que dan lugar a un Informe en el que se establece que: 

Considerando que podría haberse producido la infracción prevista en el articulo 141.1a) del RD Legislativo 1091/1998 de 23 de septiembre, que será sustituido por el articulo 177.1a) de la Ley 47/2003 de 26 de noviembre General Presupuestaria, cuando entre en vigor el 01/01/2005, según el cual constituyen infracciones : “Haber incurrido en alcance o malversación en la administración de fondos públicos”.  Concluyendo que debería darse conocimiento al Tribunal de Cuentas. Con fecha 15/06/2004 la Subsecretaría del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales remite el informe elaborado por la Inspección General de Servicios del Departamento al Tribunal de Cuentas. 

Con fecha 22/06/2004 se pone en conocimiento de la Subdirección Financiera del Departamento diversas facturas  emitidas por la empresa Viajes Evasión a la atención de Cristina Grau Navarro encontradas de “manera accidental en un archivador de este centro de trabajo” . El importe global de las mismas por conceptos de viajes realizados durante el periodo que abarca desde el 25/07/2003 a 04/02/2004 asciende a 6.140,46€.   

El 06/07/2004 se da traslado al Tribunal de Cuentas, mediante escrito de la Subsecretaría del Ministerio, de la “documentación encontrada con posterioridad al informe del 15 de junio”. 

El día 04/09/2004  y el 05/09/2004 el periódico LEVANTE-EMV publica dos artículos en los que retoma el caso. El primero de ellos señala que el Ministerio pagó viajes en avión entre Madrid y Valencia a Cristina Grau e indica que una factura emitida por la agencia de viajes Evasión al Ministerio de Trabajo refleja el coste de un viaje en avión de ida y vuelta a Valencia por un importe de 324,90€  el día 31 de octubre del 2003, indicando la referencia de la factura 05064/03 y el número de expediente 1/7412/00/03. Dicha factura se encuentra entre las que fueron encontradas de “manera accidental en un archivador de este centro de trabajo”  como se explica anteriormente. La segunda noticia presenta el siguiente titular El Tribunal de Cuentas investiga el caso de la asesora de Zaplana que cobraba el paro. En el artículo se explica que el Tribunal de Cuentas dispone, desde el mes de mayo, del informe oficial realizado por la inspección general de servicios del Ministerio sobre Cristina Grau tras constatarse que existían indicios de “malversación en la administración de fondos públicos”. Dicha investigación se inició en el mes de febrero siendo Zaplana todavía Ministro. Por último el articulo recoge que fuentes oficiales del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales declararon que desconocían oficialmente la existencia de estos cargos, en referencia a la factura de viajes, y que sería el Tribunal de Cuentas el que determine el alcance del contenido del informe. 

Actualmente Cristina Grau Navarro es Coordinadora de Delegaciones de Canal 9  (Televisión Pública de la Comunidad Valenciana)

LAS NOTICIAS TAL CUAL

El ministerio de Zaplana pagó viajes de avión a su asesora de prensa que percibía el paro

El ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales pagaba los viajes de avión entre Madrid y Valencia que realizaba Cristina Grau, la asesora de prensa personal del ex ministro Eduardo Zaplana, que ejerció sus funciones al tiempo que cobraba la prestación por desempleo. Así se constata en las facturas emitidas al citado departamento ministerial por la agencia de viajes contratada por el ministerio a las que ha tenido acceso este periódico.

El ministerio de Zaplana reconoció el pasado mes de febrero en una nota de prensa oficial que la asesora de prensa trabajó para el ex ministro, pero calificó esa relación de «desinteresada». «Es cierto que ha colaborado de manera desinteresada y sin ser retribuida por ello, en determinados momentos, pero su colaboración siempre ha sido de forma totalmente desinteresada», afirmaba la citada nota oficial. Esta asesora de prensa trabajó en el equipo de colaboradores más estrecho de Zaplana al menos durante cinco meses entre octubre de 2003 y febrero de 2004Ñ, tiempo en el que compatibilizó esas funciones con la percepción del seguro de desempleo. Tras la publicación de esa circunstancia en este periódico la asesora de prensa dejó el ministerio. Semanas después fue contratada en Canal 9.

Durante el tiempo que estuvo trabajando con Zaplana dispuso de una dirección de correo electrónico personalizada facilitada por el ministerio, así como de un despacho oficial y un teléfono directo, según constaba en el directorio interno del departamento ministerial. En diversas ocasiones acompañó al entonces ministro Zaplana en actos oficiales, incluso al Congreso de los Diputados, y sirvió como interlocutora a periodistas de información laboral. Los documentos a los que ha tenido acceso este periódico demuestran que también generó gastos al presupuesto del departamento ministerial. En concreto, el ministerio de Zaplana abonó viajes de avión a esta asesora de prensa entre Madrid y Valencia. Así queda reflejado en una factura emitida por la agencia de viajes Evasión al ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Esta agencia es la concesionaria para la gestión de los viajes oficiales que realiza el personal del departamento. La citada factura, con fecha 28 de octubre de 2003, refleja el coste de un viaje de avión, ida y vuelta, en la compañía Iberia para unos días más tarde, concretamente el 31 del mismo mes. La hora del primer vuelo, Madrid-Valencia, es las 16,20 horas. El cupón de vuelo emitido, aportado por la agencia como justificante del billete, está a nombre de Cristina Grau. Los billetes de avión son nominales por exigencias legales. El importe total de esta factura emitida por la agencia de viajes a la dirección oficial del ministerio asciende a 324,90 euros. Esta cantidad incluye los impuestos y las correspondientes tasas aeroportuarias.

La factura lleva la referencia 05064/03. y como número de expediente figura el 1/7412/00/03. En el texto de la factura de la agencia de viajes también figura el nombre de Cristina Grau. Fuentes de la Administración señalaron a este periódico que para la emisión de un billete de estas características es imprescindible que se encargue a la agencia concesionaria a través de los cauces administrativos oficiales del ministerio correspondiente.(*) Publicado en la edición digital de Levante. 04 Septiembre

Trabajo acreditó a la asesora de Zaplana para que asistiera a los plenos del Congreso

La asesora de prensa del ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, que se encuentra en situación de desempleo y cobrando el paro, Cristina Grau, recibió el pasado mes de diciembre un pase de libre circulación para acceder a las dependencias del Congreso de los Diputados . Estos pases se conceden a los asesores y personal de confianza de los ministros tras una petición expresa por parte de los miembros del Gobierno con el fin de que les acompañen en las sesiones parlamentarias.

El pase fue tramitado por un miembro de la Mesa del Congreso de los Diputados al departamento de Gobierno interior de la Cámara baja. «Por eliminación fue uno de los cinco miembros del grupo parlamentario popular quien lo hizo», agregaron las mencionadas fuentes al descartar que la gestión fuese realizada por algunos de los otros cuatro miembros pertenecientes a la oposición.

Según los registros consultados, el pase de libre circulación para la asesora de Zaplana servía para acceder al recinto parlamentario durante varios días en los que hubo sesiones plenarias y a las que asistió el ministro de Trabajo y portavoz gubernamental. Su utilización era válida para los días 10, 11, 18 y 23 de diciembre. En la solicitud del pase de libre circulación figuran el DNI de esta asesora personal de Zaplana y otros datos personales que se requieren para su concesión, explicaron las fuentes. «Esos datos sólo se pueden facilitar con credibilidad desde instancias oficiales», añadieron.

Sin embargo, la colaboradora de Zaplana, Cristina Grau, ha sido destituida, según anunciaba  Elsemanaldigital.com, a pesar de que el portavoz del Gobierno reiteró que Grau no estaba vinculada contractualmente a su departamento y que colaboraba de forma espontánea y sin retribución alguna. Aunque todo «fue discreto», la citada publicación electrónica «pudo comprobar que se actuó con celeridad para tratar de zanjar el "caso Grau"». Nadie en el ministerio quiso entrar en detalles sobre este asunto a lo largo del día de ayer «sabiendo que se trataba de un asunto escabroso que ha sentado muy mal al ministro», afirmaban.

Desde elsemanaldigital.com se preguntaban si «hubo presiones desde la misma Moncloa para que este asunto se zanjara de forma discreta» y si «los movimientos en La Moncloa se produjeron después de fuertes presiones en Génova sobre un asunto que podía dañar la precampaña del PP».

En la calle Génova «nadie pone la mano en el fuego» por Zaplana tras el caso Grau según informaba Elsemanaldigital.com. «Con Zaplana detrás es fácil que te quemes», indicaban. «Zaplana se ha traído de Valencia una legión de colaboradores. No ha montado un gabinete de prensa al uso de un Ministerio, sino un súpergabinete complicado de explicar», decía la publicación digital. «Evidentemente, mantener tanto personal vía presupuesto jamás se lo hubiesen permitido ni Aznar ni Rato, así que o las gentes de Zaplana colaboran con él desinteresadamente», aseguraban en el portal. Elsemanaldigital.com. señalaba que el caso Grau «puede ser sólo la punta del iceberg» y que «Zaplana no sabe diferenciar adecuadamente lo privado de lo público y esta confusión le va a acarrear muchos disgustos». Publicado en la edición digital Levante.15.02.04

Una colaboradora de Zaplana cobra el paro y trabaja para el ministerio sin percibir sueldo  

Eduardo Zaplana, ministro de Trabajo y Portavoz del Gobierno, tiene en el departamento de prensa de su ministerio a una colaboradora que no percibe sueldo y cobra, desde octubre pasado, el seguro de desempleo, según informó el diario valenciano Levante. La colaboradora de Zaplana -la periodista Cristina Grau, que fue jefa de prensa de la Consejería de Cultura de la Generalitat Valenciana hasta el cambio de Gobierno tras las elecciones de mayo pasado- argumenta su colaboración gratuita con Trabajo por "lealtad personal y política" con el ministro.

"¿Trabajar sin cobrar es delito? Porque yo estoy trabajando sin cobrar", argumenta. Añade que, para ella, la "lealtad política está por encima de todo", que "en política se está por lealtad y no por dinero", y que no ve "qué tiene de malo echar una mano sin cobrar". Grau no es militante del PP y relata que el ministro le dijo que no podía ofrecerle nada ahora, pero que "quizá podría encontrarle algo después de las elecciones" generales de marzo.

Para desarrollar su función, la colaboradora utilizaba en el Ministerio de Trabajo un puesto en el gabinete de prensa, un ordenador, un correo electrónico, una extensión telefónica y un teléfono móvil. La jefa de prensa del ministerio, Elena Sánchez, asegura que facilitó esta infraestructura a la colaboradora de Zaplana a iniciativa propia, sin consultárselo al ministro y sin pensar que cometiera ninguna irregularidad. Sánchez subraya que no había ningún tipo de relación contractual con Grau, que su tarea no estaba sujeta a horarios y que, sobre todo, acompañaba al ministro en algunos desplazamientos a la Comunidad Valenciana, donde es presidente regional del PP.

Enrique Lillo, abogado de Comisiones Obreras, mantiene que esta relación de colaboración desinteresada "parece un fraude de ley". Argumenta que los trabajos desinteresados se realizan "como voluntario en una ONG o una parroquia, o como militante en un partido o sindicato, y el Ministerio de Trabajo no es una organización ideológica sino la máxima autoridad responsable del buen funcionamiento del mercado de trabajo en España".

Este abogado de CC OO matiza que la Inspección de Trabajo tendría que investigar para ver si las tareas que cumplía la colaboradora de Zaplana serían calificables como de trabajo asalariado. Y opina que si la Inspección concluye que las tareas que realiza la colaboradora de Zaplana son propias de un asalariado, el empleador "habría incumplido el deber de retribución". El ministerio hizo ayer una consulta al Inem para indagar si tal colaboración era o no compatible con el cobro del paro. La respuesta fue que sería compatible si se considera un "trabajo por amistad, benevolencia o buena vecindad", tal como lo recoge el artículo 1.3.d del Estatuto de los Trabajadores.

Publicado en la edición digital El País.13.02.04

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