ALBERTO RUIZ GALLARDÓN  :  UN GENOVÉS DE LOS QUE YA NO QUEDAN

UN GESTOR RUINOSO

GALLARDÓN DEJARÁ MADRID CON UN ‘AGUJERO’ QUE COSTARÁ DURANTE AÑOS 100.000 EUROS POR HORA

Las cuentas elaboradas por el Ayuntamiento de Madrid para su envío al Ministerio de Economía y Hacienda señalan que a 31 de diciembre de 2011 el consistorio tendrá una deuda viva de 6.061 millones de euros (la más alta de España para un ayuntamiento), de los que 2.198 millones corresponden a la faraónica obra del soterramiento de la M-30, la autovía que la Comunidad de Madrid aprobó que pasara a ser calle para poderle dar las licencias de obra y que será pagada por los madrileños durante dos décadas.

Las obras de la M-30 les siguen costando a los madrileños 17.000 euros a la hora

El Ayuntamiento de Madrid ya ha dejado hechas las cuentas hasta 2015, con lo que la previsible nueva alcaldesa, Ana Botella, esposa de José María Aznar, no tendrá que preocuparse de hacer los presupuestos. Esto ha sido así porque el consistorio madrileño tiene en 2011 una deuda viva media que supone el 158% de sus ingresos ordinarios presupuestarios. Y cuando la cifra es superior al 110% no puede pedir dinero a los bancos sin autorización expresa del Ministerio de Economía y Hacienda, al que hay que enviar un plan para alcanzar ese porcentaje de endeudamiento.

La deuda en 2015, 105% de los ingresos presupuestarios

El equipo de Ruiz Gallardón ha elaborado un plan en el que en 2015 el Ayuntamiento de Madrid tendrá una deuda que será del 105% de sus ingresos presupuestarios, con lo que habrá cumplido su compromiso y podrá volver a endeudarse sin permiso. Para ese año 2015 la carga de la deuda por intereses y amortización del principal será prácticamente la misma que en 2011, puesto que el coste de los préstamos pendientes de amortizar no se reduce.

Por de pronto, para 2012, toda esa carga financiera supondrá para el Ayuntamiento de Madrid un desembolso de 103.000 euros por hora. De ellos, 86.000 euros corresponderán a la deuda general del consistorio, a razón de 20.000 euros a la hora de intereses y 66.000 euros de amortización de principal. La M-30, por su parte, gastará 17.000 euros a la hora, de los que 10.000 euros corresponden a intereses y 7.000 a amortización del principal.

La esperanza, recaudar más impuestos si se sale de la crisis

Para 2015 la cosa no habrá mejorado. Las cantidades serán prácticamente las mismas, pero el Ayuntamiento de Madrid calcula que ingresará 450 millones más al año y su deuda, como no puede suscribir nuevos préstamos con los bancos porque lo tiene prohibido por ley, habrá disminuido en poco más de 1.700 millones de euros, fruto de las amortizaciones devueltas a las entidades financieras durante estos cuatro ejercicios presupuestarios.

En cuanto a la fuente para incrementar los ingresos presupuestarios, además de prever que a partir de 2013 tendrá un aumento gradual debido a la mejor marcha de la economía de España y, por tanto, de su participación en los impuestos del Estado, el Ayuntamiento confía una parte importante de su subida en la recaudación a sus propios impuestos, fundamentalmente el IBI y el de plusvalía, para los que, en conjunto, prevé incrementos del 6,7%, 5,3% y 5,1%, respectivamente, para los tres años que van de 2013 a 2015.

www.elplural.com 25.10.11

GALLARDÓN EXPRIME LA PERRA CHICA

La abultada deuda y la prohibición de refinanciarla obliga al Ayuntamiento a medidas de ahorro aún más profundas de las que propugna ahora el líder del PP

Mariano Rajoy tiene un mandamiento: austeridad. Y quiere aplicarlo en las autonomías y municipios ganados el 22 de mayo. Pero el PP ya gobernaba en muchos antes. Es el caso de Madrid: la región la dirige Esperanza Aguirre desde 2003, y de hecho las medidas anunciadas el miércoles por el líder popular se inspiran en la letra y la convicción liberal de los planes de la presidenta autonómica en los últimos años.

Tanto el déficit como la deuda regional están bajo control, aspecto del que no puede presumir el Ayuntamiento. Por ello, el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, que lo es desde 2003 (aunque heredó 12 años de gobierno popular), está inmerso desde hace tiempo en un proceso de ajuste presupuestario que incluso supera en ciertos aspectos las directrices de Rajoy. Algunos recortes vienen de lejos; otros, como una posible reducción de distritos o áreas de Gobierno, se están estudiando ahora.

- Altos cargos y asesores. "En la diputación de Pontevedra, yo tenía cero asesores; no le digo que ninguno, pero pueden tener muchos menos", aseguró Rajoy. El Ayuntamiento cuenta con 123 altos cargos; esta cifra no se ha recortado en los últimos tiempos, aunque sí el sueldo que cobran, congelado desde 2008 y recortado un 15% el año pasado (eso permitió ahorrar 2,7 millones al año). Además, el Gobierno municipal dispone de 221 asesores elegidos a dedo, a los que se suman 89 más para los grupos políticos (PP, 36; PSOE, 35; IU, 18). Estos últimos deben repartirse de nuevo (o incrementarse) ahora que UPyD entra en el Consistorio. Su labor, de sesgo más político, complementa el de los 27.000 empleados públicos del Ayuntamiento.

- Gastos corrientes. Ahogado por la deuda (y la prohibición del Estado de refinanciarla), el Ayuntamiento está reduciendo a marchas forzadas el dinero que necesita para funcionar. Desde 2008 ha ahorrado 75,3 millones en publicidad (esta partida se ha recortado un 74%), estudios técnicos (43%), viajes, dietas o material. A esto se suma la reducción de plantilla (eliminando los puestos cuyo titular dejaba libre, pero sin despedir). Desde 2009, se ha pasado de 28.150 a 26.422 empleados. Además, ahora cobran menos.

- Edificios. El Ayuntamiento se disemina por 1.571 inmuebles, 73 de ellos alquilados (4,65%). Apretando las tuercas con los contratos ha ahorrado 23 millones. El 0,83% de los edificios municipales está en desuso, en parte a la espera de ser reformados.

- Compras. Madrid presume de gestión centralizada de compras desde 2003 dentro de su ámbito de gobierno (electricidad, agua, renting o publicidad), y en colaboración con la Comunidad (mobiliario, maquinaria).

- Gastos protocolarios. El presupuesto asigna 292.783 euros a esta partida, de los que 16.400 corresponden al alcalde; 8.180 al vicealcalde; 5.450 a los delegados de las áreas de Gobierno; y 3.630 al resto de ediles. Este dinero (para comidas, visitas, etc.) se redujo un 28% desde 2008; en 2010, además, sólo se gastó un 62%.

- Coches y móviles. "Que todos los concejales tengan coche, pues mire, no", dijo Rajoy. Más allá del anunciado recorte de vehículos oficiales, el Ayuntamiento ha examinado todo su parque móvil (camiones, coches de policía, etc.). Desde 2008, ha ahorrado un 10% con un sistema de renting. En la actualidad tiene 2.950 teléfonos móviles, que suponen un gasto total de 72.000 euros. Sus planes de ahorro pasan, entre otras medidas, por la migración a telefonía IP (llamadas a través de Internet).

- Eficiencia energética. Entre 2003 y 2010 se incrementaron un 12% los puntos de luz (hasta 26.497), pero el aumento de potencia instalada fue solo del 1,4%. Se ha rebajado la intensidad del alumbrado público: iluminar nuevos barrios apenas ha incrementado el consumo total. En los edificios oficiales, cerrar la oficina a las cinco de la tarde ha supuesto un ahorro de 1,31 millones.

- Administración adelgazada. En la pasada legislatura se extinguieron cuatro fundaciones. En el mandato que ahora empieza, el Ayuntamiento promete adelgazar aún más el sector público, pero sin explicar cómo. Rajoy abogó además por "reducir las delegaciones de las autonomías en cada provincia". Eso, aplicado al Gobierno municipal, implicaría un cambio en la división de la ciudad en 21 distritos. Sobre esta modificación (podrían eliminarse todos, o centralizarse en solo cuatro o cinco áreas) se ha hablado mucho en campaña, pero todavía no existe un plan concreto consensuado.

- Pago a proveedores. Quizá sea el punto más espinoso. El retraso máximo del pago a las empresas de recogida de basura es de 10 meses, con una media de siete meses sobre el vencimiento de factura. Si el Gobierno central permite refinanciar la deuda municipal, el PP se compromete a reducir esta demora en tres meses. Si no, todo seguirá igual.

www.elpais.es 03.06.11

GALLARDÓN CONCENTRA UN 22% DE LA DEUDA MUNICIPAL ESPAÑOLA

Las ciudades que deben más dinero, después de Madrid (6.453 millones de euros), son Barcelona (1.202 millones), Valencia (890), Zaragoza (748) y Málaga (743)

La deuda del Ayuntamiento de Madrid, de 6.453 millones de euros al cierre de 2010, representa el 22,3 por ciento del total de lo que deben los 8.116 consistorios españoles, y el 18,2 por ciento del conjunto de la entidades locales, según datos del Ministerio de Economía.

La deuda financiera de las entidades locales al cierre de 2010 era de 35.443 millones de euros, el 3,3 por ciento del PIB, con lo que en ese año aumentó en 848 millones, un 2,4 por ciento. En el caso de los ayuntamientos, el endeudamiento fue de 28.851 millones de euros.

Tras Madrid, el ayuntamiento con más deuda es el de Barcelona, con 1.202 millones de euros, seguido de Valencia, con 890 millones; Zaragoza, 748; Málaga, 743, y Sevilla, con 544 millones de euros. Estos seis municipios acumulan el 36,6 por ciento de la deuda del conjunto de los ayuntamientos.

Por volumen de deuda, hay 33 municipios que superan los 100 millones de euros, entre ellos, tras los citados, los de Córdoba, Valladolid, Palma de Mallorca o Murcia y ayuntamientos que no son de ciudades capitales como Elche, Gandía, Hospitalet y Badalona.

Según los datos del Ministerio de Economía, hay 3.077 municipios, más de un tercio del total, que no presentan deuda alguna. Aunque la deuda municipal media por habitante es de 613,6 euros, hay 377 ayuntamientos donde el endeudamiento supera los 1.000 euros por vecino.

www.publico.es 02.06.11

LA DEUDA MUTILA LAS CUENTAS DE GALLARDÓN 

La escena se repite. Una administración, un presupuesto y una conclusión: las cuentas más restrictivas de la historia. Esta vez le toca al Ayuntamiento de Madrid, que presentó ayer sus cifras para 2011. La capital dispondrá de 4.526 millones para gestionar la ciudad. Eso significa un 8,9% menos, 410 millones de recorte. Se repite el tijeretazo, pero cambian las fórmulas. El Ayuntamiento juega sus cartas para encarar su principal problema: se ha quedado sin liquidez porque está obligado a amortizar su deuda, que asciende a 7.145 millones. Esta es la única partida que no se rebaja y a la que se destinan 294 millones. 

Por primera vez las cuentas contemplan más ingresos (4.585 millones) que gastos (4.542 millones), pero no se trata de contención. Por imposición del Gobierno, los 43 millones que Gallardón ahorra con la reducción del 5% en nóminas tienen que destinarse a cancelar créditos futuros; ni un euro para gasto corriente. Para sanear cuentas Gallardón ha aprobado que una empresa municipal le compre el 51% de Mercamadrid. Si sale bien, según el Ayuntamiento, se acelerará el pago a proveedores. Los mayores recortes recaen en Obras y Hacienda, pero también superan la media en Servicios Sociales. Se notarán más en los distritos de Villa de Vallecas y Salamanca.Los presupuestos no dan solución a los más de 900 millones que el Ayuntamiento debe a sus proveedores, en algunos casos, desde hace más de 10 meses. Y aunque Gallardón traspasa la responsabilidad al Gobierno ha tenido que buscar vías alternativas con las que reducir los retrasos hasta cuatro meses. 

La primera, que aún depende de la aprobación del Ejecutivo, es la subrogación de la deuda de la M-30, que permite un ahorro anual de 100 millones que se destinaría a pagar a proveedores. La última ha sido permitir que Madrid Espacios y Congresos, de titularidad municipal, le compre el 51% de su participación en Mercamadrid por 200 millones de euros. Para el portavoz socialista David Lucas, los presupuestos no contemplan "medidas reales de ahorro y austeridad. Se parchea, se utiliza el cambalache presupuestario y quienes pagan las consecuencias son los madrileños, ya que no se solucionan los verdaderos problemas". 

- Por distritos. El dinero para distritos cae un 7,24% hasta los 561,34 millones, principalmente por el descenso en inversiones. El ajuste más severo lo ha sufrido Villa de Vallecas, que pierde el 20% de los recursos que recibió en 2010. Con los 18,5 millones que se destinarán se mantiene el dinero para servicios sociales y para mayores, pero no cuenta con los cuatro millones que el año pasado sirvieron para construir centros deportivos y educativos. El segundo en recortes es Salamanca, uno de los más prósperos. Pierde más del 13% y se queda en 18 millones. El mayor recorte se repite en las inversiones en equipamientos deportivos, que se reducen casi a la mitad, con 2,5 millones de euros. "El liderazgo de Madrid es el de su deuda; no solo la financiera, sino la que tiene contraída con los barrios y los distritos que viven al margen de sus grandes proyectos con deficiencias en las dotaciones y en los servicios", criticó el candidato a la alcaldía por IU, Ángel Pérez. 

La Concejalía de Obras y Espacios Públicos es la que más dinero pierde, con un recorte del 23%. Le siguen Hacienda y Urbanismo con un descenso del 18% cada una. De los 205 millones que le corresponderán a Urbanismo se destinarán 37,4 millones a culminar el proyecto de Madrid Río antes de que finalice la legislatura. 

El área de Economía, Empleo y Participación Ciudadana baja un 13,51% sus recursos hasta los 105 millones. El Ayuntamiento mantiene que su prioridad serán los desempleados, a los que se dedicarán 45,2 millones, y que en el recorte ha influido que ha reducido un 93% las inversiones. 

La Concejalía de Familia y Servicios Sociales rebaja también su presupuesto un 10,41% y contará con 233 millones. Los recortes en esta área se deben principalmente a que se han eliminado los 18 millones que el Ayuntamiento destinaba a proyectos de Cooperación al Desarrollo. Gallardón promete que asegurará los servicios de asistencia a los mayores, una de las pocas partidas que no se resienten. 

(www.elpais.com, 26/11/10)

LAS DEUDAS DEL CONSISTORIO AHOGAN A LAS PYMES DE ACTIVIDADES CULTURALES

La crisis de las arcas municipales asfixia también a decenas de promotoras de eventos y espectáculos que trabajan en la capital

Ya lo anunció el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón después de su aciaga entrevista con Zapatero el miércoles: hay serias dificultades para pagar a los proveedores. Y añadió: "Las pequeñas y medianas empresas van a verse afectadas". Es cierto. Centenares de pymes sufren la morosidad del Ayuntamiento. Pequeñas empresas a las que, tras esas declaraciones, se les vino el mundo encima. Concretamente, a las que vienen organizando, tras ganar los concursos públicos, las actividades culturales de Madrid: cabalgatas, fiestas patronales, carnavales, animación infantil... Los retrasos en los pagos llegan en algunos casos a los nueve meses, cuando, según los contratos, deben cobrar a los 60 días de presentar la factura. Y la deuda del sector, según la Asociación de Representantes Técnicos del Espectáculo (ARTE, que aglutina al 90% de las compañías de managers, representantes y productores del sector: 117 empresas en Madrid), alcanza los 10 millones de euros solo en la capital. Las compañías consultadas aseguran que están al borde de la quiebra, que se ven obligadas a prescindir de trabajadores y que no pueden pagar a sus proveedores, después de décadas trabajando con ellos.

La ampliación de los créditos y la hipoteca de sus propios bienes se han convertido en el recurso de emergencia para mantenerse a flote ante una situación que no tiene visos de mejorar en el corto plazo, cuando el Ayuntamiento ha recibido un no por respuesta de Zapatero. Lejos de los palacios de Cibeles y Moncloa, las consecuencias de estas deudas tienen nombre y apellidos.

"Esto es el mundo al revés. Nos hemos convertido en los bancos o las financieras del Ayuntamiento, y nosotros no tenemos capacidad económica para asumir tanta deuda. La prueba es que la gente está teniendo que hacer encaje de bolillos con los bancos para poder llegar a fin de mes y no puede siquiera pagar a sus proveedores", dice Emilio Santamaría, presidente de ARTE.

Cuando Santamaría habla de "la gente" se refiere a personas como Cristina de Santiago (ASI-KEM S.L.), Gloria Parra (Yeiyeba), Augusto Teruel (Teruel Producciones S.L.) o Fernando Navarro (Piruleta).

Gente que gestiona pequeñas empresas promotoras de eventos y que lleva décadas (35, 25, 20 años...) trabajando para el Ayuntamiento; organizando desde las fiestas de Moncloa-Aravaca a las de Arganzuela (contratación de artistas, orquestas, equipos técnicos, seguridad...) a la cabalgata de los Reyes de Usera (carrozas, vestuario, escenarios, actuaciones...), o las actividades y juegos para niños de la Cuesta de Moyano.

Este periódico ha hablado con nueve empresas del sector y ha constatado que las deudas son millonarias y que suelen ir acompañadas de entrevistas a la desesperada con el concejal de Hacienda del Ayuntamiento, Juan Bravo, o con el tesorero, José María Polo.

Ambos se han convertido en una especie de servicio de urgencias económico del Consistorio, que trata de agilizar o dar cierta prioridad a los pagos más perentorios o que pueden tener consecuencias más catastróficas, como pérdidas de empleos o cierre de empresas.

Según la información que pudo contrastar ayer este periódico, cinco de las nueve empresas consultadas acumulan ya una deuda de 5.428.271,51 euros.

La falta de liquidez del Consistorio, que va pagando a trancas y barrancas, ha abocado a los propietarios de las compañías del sector sociocultural a constantes visitas a los bancos para conseguir ampliaciones de hipotecas o de líneas de crédito para subsistir y poder pagar tanto a sus trabajadores como a sus proveedores.

Los bancos son la tercera pata de esta crítica historia. Tanto el Ayuntamiento como los pequeños empresarios sufren la rigidez que impera en los últimos meses en las entidades financieras, que no aceptan anticipar facturas de más de tres o cuatro meses. Y si se tiene en cuenta que el Consistorio está pagando con un retraso de entre seis y nueve meses...

"Acabo de salir del Banco Popular y me han dicho que del Ayuntamiento no quieren saber nada, ahora voy a probar suerte en otros. Lo que antes era casi trabajar con un aval se ha convertido en una condena", dice Augusto Teruel, secretario general de ARTE y propietario de la empresa Teruel Producciones SL, con la que el Consistorio acumula una deuda de 747.517,75 euros por las actividades y espectáculos realizados en los distritos de Hortaleza, Villaverde, Moncloa y Usera desde el pasado mes de abril.

Teruel lleva 20 años trabajando en Madrid y asegura que, "aunque los retrasos se vienen produciendo desde el año pasado, nunca habían llegado a los niveles actuales, que no nos pueden decir ni cuándo cobraremos".

Cristina de Santiago, de la empresa ASI-KEM SL, vive una situación similar: "Todavía me deben actividades de enero cuyas facturas han caducado en marzo. Yo ya estoy desesperada. Llevo 35 años trabajando aquí, tengo una reputación y un nombre. Nunca he vivido nada igual, no puedo pagar a mis proveedores, tengo 400 euros en la cuenta y no me llega ni para pagar la hipoteca que me pasan a mediados de mes. Vivo con mi madre, que tiene 80 años, he tenido que prescindir de dos de mis trabajadores, no puedo más".

Ella se entrevistó el pasado miércoles con el tesorero Polo que le ofreció la posibilidad de pagarle una de las facturas más bajitas: 6.161 euros "para ir tirando", de los 265.755,60 que le adeuda el Ayuntamiento.

Aparte de las empresas de espectáculos, están también las que se dedican a Equipamientos Culturales, asociadas en patronales como Educatia, por ejemplo, que reúne a 18 empresas en Madrid y suma 8.000 trabajadores, que nutren de actividades (pintura, teatro, bailes de salón, yoga...), a los centros culturales de la capital.

La semana pasada, uno de los representantes de esta patronal y director de una de las empresas con 700 trabajadores (que este mes han cobrado el día 10) se reunió con Bravo y le puso sobre la mesa las facturas de nueve de esas empresas por valor de ocho millones de euros. "Nos han pagado hace una semana la factura de abril (4.205.278,16 euros). Nos han prometido que nos pagarían en noviembre la correspondiente al mes de mayo y ya en enero la de junio, pero que si no se refinancia la deuda del Ayuntamiento podemos tardar en cobrar un año la siguiente".

La retahíla de impagos continúa: "Esta mañana he salido llorando del banco, tengo que hipotecar mi casa y me la tasan mucho más baja que hace ocho años. Y encima tengo que gastarme 6.000 euros en notarios", cuenta Fernando Navarro que, con sus ocho trabajadores, organiza actividades infantiles con su empresa Piruleta en los distritos de Retiro, Chamberí, Hortaleza y Usera, y que acumula una deuda de 190.000 euros desde mayo.

La situación es crítica y tiene más nombres y apellidos, aunque muchos de los empresarios de este sector no se atreven a salir en los papeles por miedo a sufrir más retrasos en los pagos o incluso represalias futuras en la adjudicación de nuevas actividades culturales. Llegado este punto, los responsables del Ayuntamiento se limitan a remitir a las últimas palabras del alcalde, hasta que el próximo jueves se presenten los nuevos presupuestos.

www.elpais.es 19.11.10

LA PATRONAL DE LIMPIEZA HABLA DE UNA SITUACIÓN "EXTREMA"

El Consistorio debe al sector todas las mensualidades de 2010

Los grandes proveedores del Ayuntamiento, las empresas que juegan en la primera división de las finanzas nacionales, también están sufriendo dificultades derivadas de la falta de pago del Ayuntamiento de Madrid.

Compañías de la importancia de FCC, ACS, Ferrovial y Sacyr Vallehermoso, que forman parte de la asociación de limpieza Aselip, llevan sin cobrar 10 meses, y no lo harán tampoco en diciembre. "El Ayuntamiento de Madrid nos dijo que nos pagaría en enero de 2011", asegura Francisco Jardón, presidente de esta patronal.

La situación la define la patronal como "extrema". Y es que las cantidades que se barajan son astronómicas: alrededor de 500 millones de euros paga el Ayuntamiento a las empresas que se encargan de la limpieza de la capital.

"Llegará un momento en que no se pueda pagar a los trabajadores, y puede ser de forma inmediata. Nos vamos a poner en 12 meses sin cobrar y no podemos mantener ese desfase de tesorería", asegura Jardón, que anuncia un encuentro a primeros de diciembre de las empresas del sector para analizar la situación.

Lo último que estas empresas ingresaron procedente del Ayuntamiento de Madrid fueron los meses de noviembre y diciembre de 2009, y eso tras hacerse público que no podían abonar las nóminas al carecer de fondos para pagar a los trabajadores. El Consistorio pagó entonces, pero es un parche que apenas tapa la herida que sufren las empresas del sector.

Agotado el recurso de los créditos del ICO que el Gobierno tampoco ha permitido utilizar a los Ayuntamientos, el presidente de Aselip ve poco margen para el optimismo, asegura que ahora se trata de una situación de supervivencia y reconoce que aunque el Consistorio madrileño es un cliente muy importante, "un cliente también te puede llevar a la tumba".

www.elpais.es 19.11.10

 ZAPATERO DICE NO AL PLAN DE GALLARDÓN PARA SALVAR LA DEUDA DE LA CAPITAL

Decepción en el alcalde tras salir de La Moncloa sin lograr ningún resultado


Enorme decepción. Eso es lo que se apreciaba en la cara del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, cuando entró en la sala de prensa tras su reunión ayer con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Y eso es lo que explicó a continuación: no habrá posibilidad de refinanciar la enorme deuda del Ayuntamiento de la capital de España, una petición que hizo en su nombre y en el de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).

La negativa del Gobierno coloca al alcalde de Madrid en una situación límite. La posibilidad de refinanciar ya los 257 millones de euros de la deuda que vencen a final de año le permitía tapar algunos agujeros muy importantes. El consistorio madrileño tiene problemas de tesorería muy graves, que se traducen en serias dificultades para pagar a los proveedores, algunos de los cuales (como las empresas de limpieza) llevan desde principios de año sin cobrar, y que han provocado amenazas de huelga. "Las pequeñas y medianas empresas van a verse afectadas", dijo el regidor. El balón de oxígeno que esperaba obtener de Zapatero desaparece ahora, y la situación de Gallardón se antoja muy complicada justo antes de que presente unos presupuestos de la ciudad para el año que viene que a la fuerza tendrán que ser muy restrictivos. Refiriéndose a ellos, el alcalde solo aseguró que las nóminas no se verán afectadas, ni tampoco los servicios sociales para los más perjudicados por la crisis.

El Gobierno abrió la mano en septiembre para que los Ayuntamientos que no tuvieran una deuda superior al 75% de sus ingresos corrientes pudieran refinanciarla y acceder a un crédito que en estos tiempos se antoja imprescindible para seguir funcionado. Pero de esa norma quedaban fuera algunos Ayuntamientos importantes, como el de Valencia y sobre todo el de Madrid. De ahí que Gallardón pidiera a Zapatero una solución para las corporaciones locales que no cumplían los objetivos. Una propuesta que envió a La Moncloa y en la que el Ayuntamiento tenía puestas muchas esperanzas, que se desvanecieron ayer.

"No hay ningún elemento de optimismo", dijo ayer el alcalde. La negativa del presidente del Gobierno a modificar la normativa para dar un balón de oxígeno a los Ayuntamientos más endeudados se basa, según relató el alcalde, en "los compromisos internacionales adquiridos por el Gobierno de España". Algo que Gallardón no acaba de entender, sobre todo porque, como recuerda últimamente cada vez que tiene la oportunidad, la deuda de las corporaciones locales sólo es el 6,3% del total de las Administraciones, y la parte del león se la lleva el Estado (77%) y las comunidades autónomas (13%). El alcalde recordó que Madrid no tiene dificultades para pagar su deuda, y que dedica a ella 3,4 euros de cada 100, mientras que la Administración central destina 10. "Si alguien hace un reproche al Ayuntamiento tendría que multiplicar por tres el reproche a sí mismo", dijo Gallardón, ya que la situación del consistorio es "tres veces mejor" que la del Estado.

"Queremos una regulación legal equivalente a las de las comunidades autónomas y el propio Estado. Es una situación de discriminación legal carente de sentido", se quejó el alcalde de Madrid, que insistió en que la negativa del Gobierno le aboca a una situación en la que los proveedores de los Ayuntamientos van a ser los principales perjudicados.

Gallardón reiteró que su propuesta no era solo para el Ayuntamiento de Madrid, sino que hablaba en boca de todos los alcaldes de la FEMP, que unificaron sus criterios en este tema.

Fuentes de La Moncloa, sin embargo, califican la petición del regidor como una excepción inasumible para endeudar de nuevo al Ayuntamiento de Madrid, y argumentan que decir sí a sus propuestas significaría poner en peligro la solvencia futura del consistorio y la prestación de servicios a los ciudadanos. También se admitía que esos planes de Gallardón entrarían en contradicción con los ajustes aplicados a todas las Administraciones y vigilados por Europa. En el aire queda, sin embargo, la pregunta de por qué Zapatero recibió al alcalde si su respuesta iba a ser negativa.

Ante el fracaso de la reunión, el alcalde mantiene el recurso contencioso administrativo que presentó contra el Gobierno por impedirle refinanciar la deuda.

www.elpais.es 18.11.10

GALLARDÓN ENTRA EN NÚMEROS ROJOS 

El Ayuntamiento de Madrid gasta cada día 12 millones de euros pero solo ingresa 11,3 millones. Ya no queda ni una sola luz roja de emergencia por encender. La falta de liquidez está empujando al precipicio a su alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón (PP), que no encuentra dinero para pagar a los principales proveedores. 

Los ingresos de la capital han caído en los tres últimos ejercicios un 29% -642 millones de euros menos de lo previsto-, el pago a las empresas que prestan los principales servicios acumula un retraso de nueve meses de media y la deuda asciende a 7.145 millones de euros (siete veces más que el segundo municipio más endeudado de España y muy por encima de la mayoría de comunidades autónomas). Para rematar esta gravísima situación financiera, el Gobierno central ha denegado a Madrid la refinanciación de sus créditos. El alcalde ha sufrido las tres peores semanas de sus 15 años en el poder. 

El pasado 24 de septiembre, una de las alarmas salta en el Ayuntamiento. Las cuatro grandes constructoras del país, que le prestan servicios de limpieza y recogida de basuras -FCC, ACS, Ferrovial y Sacyr-Vallehermoso- amenazan con no pagar la nómina a 12.000 trabajadores si no reciben parte de los 298 millones de euros que se les adeuda. Marcan en rojo una fecha límite: el 15 de octubre. La cúpula municipal acude a los bancos para que les adelanten dinero con el que abonar las facturas anteriores al 30 de diciembre de 2009. Los bancos aceptan. Pero es solo un parche. 

La situación es tan desesperada que los máximos ejecutivos de tres de esas empresas, a las que los municipios españoles deben 3.425 millones, acuden el martes 5 de octubre a la ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, para pedirle que facilite fuentes de financiación a los ayuntamientos. Le reunión fue un fracaso. 

La negativa de Salgado irritó tanto al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que el jueves de la semana pasada cargó contra el presidente José Luis Rodríguez Zapatero al que llamó "mentiroso" y "envidioso". Palabras que se ahorró cuando en el desfile de la Fiesta Nacional le abordó para pedirle que permitiese refinanciar los créditos que le vencen este año (257 millones, de los 7.145 millones que adeuda). "Vale, hablamos", le dijo Zapatero. Pero si el plan que le enviará el alcalde no convence al presidente, el problema de liquidez de la capital se agravará y amenazará la supervivencia de sus proveedores, que llevan nueve meses de media sin ver un euro. Gallardón, a diferencia de sus predecesores, nunca tuvo reparos en acometer los más ambiciosos proyectos, aunque para ello tuviese que triplicar su deuda en la Comunidad de Madrid o sextuplicar la municipal (véase gráfico). Todo era posible. "Nunca se han construido a la vez tantos kilómetros de metro en ninguna ciudad del mundo", presumía como presidente de la Comunidad en 1996 ante el desafío de perforar 113 kilómetros de subterráneo que financió a golpe de créditos. Su trayectoria en la Comunidad, que inició con una deuda de 2.791 millones y cerró con 8.862 millones, presagiaba su futuro como alcalde de la capital. 

"El alcalde Álvarez del Manzano no ha sabido ni gastar ni tan siquiera endeudarse. Gallardón va a entrar en el Ayuntamiento de Madrid como un tanque y vamos a pasar pronto a una situación muy distinta, que tendrá que negociar con Aznar si quiere seguir la misma política de gasto que ha realizado en la Comunidad", auguró en 2003 la entonces concejal socialista, Ruth Porta, ahora senadora. Siete años después, la situación es parecida a la que describió Porta, salvo que con quien tiene que negociar es con Zapatero. Cuando Gallardón asumió del Ayuntamiento en 2003 heredó las cuentas saneadas de Álvarez del Manzano, que invertía poquísimo -hasta el punto de que dejaba sin gastar más de la mitad del dinero presupuestado para obras nuevas-, bajaba impuestos y optó por endeudarse lo justo (1.200 millones). En solo un año, el nuevo alcalde demostró que pretendía todo lo contrario y comprometió gran parte de las inversiones que ahora, con la caja vacía, pasan factura. En sus primeros presupuestos de 2004, inmerso en la candidatura olímpica de 2012, aumentó la inversión un 60%, triplicó la deuda y subió considerablemente impuestos con el fin de "transformar la ciudad". 

Se abordaron un año después más de 50 grandes obras públicas y su macroproyecto: el soterramiento de la M-30. La inversión, de 3.200 millones, supuso un aumento de la deuda municipal de 2.500 millones que no terminarán de pagarse hasta el año 2035, a razón de 350 millones de euros anuales. Desde que llegó al Ayuntamiento, el alcalde ha gastado 5.000 millones en inversiones, de los que solo unos 900 millones se destinaron a construir equipamientos sociales, ha subvencionado unos 1.000 millones de euros de la red de Metro, que paga a medias con la Comunidad, y ha acometido casi una decena de grandes infraestructuras y peatonalizaciones, con créditos. 

El alcalde también decidió mudarse. "El Ayuntamiento tiene la obligación de identificar a los ciudadanos y situarse a la vanguardia del pueblo madrileño. Y la Casa de la Villa no lo hace", dijo. Por eso, y aunque aún no lo había visto por dentro, decidió que el Palacio de Cibeles sería el lugar perfecto para acoger parte de las dependencias municipales y un centro cultural. La mudanza, con un presupuesto inicial de rehabilitación del inmueble de 48 millones, le ha costado al final 124 millones y la etiqueta de "derrochador" que le ha adjudicado la oposición. 

El concejal de Hacienda, Juan Bravo, insiste en que la deuda no es el problema de la capital porque "es perfectamente asumible". Bravo mantiene que para afrontar sus créditos destina "solo" 9,4 de cada 100 euros que ingresa y que si sus limitaciones de endeudamiento se equiparasen al de las comunidades, a las que se le permite destinar un 25% de sus ingresos a amortizar créditos y pagar intereses, aún podría asumir el doble de deuda de la que tiene. 

El optimismo de Bravo choca con las críticas de la oposición. El PSOE acusa al alcalde de haber sido "incapaz de garantizar un equilibrio entre ingresos y gastos" y de haber "enterrado el dinero de los madrileños en hormigón en lugar de aumentar equipamientos". IU lamenta que "el gasto se haya dedicado a grandes proyectos urbanísticos en lugar de mejorar barrios necesitados". 

(www.elpais.com, 17/10/10)

GALLARDÓN DESCALIFICA A ZAPATERO POR IMPEDIRLE REFINANCIAR SU DEUDA 

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, habitualmente escrupuloso en sus formas, escenificó  un golpe sobre la mesa y arremetió duramente contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Le llamó "mentiroso" por afirmar el martes pasado en el Senado que la capital pretendía aumentar su deuda y le culpó de que el Ayuntamiento no pueda abonar las facturas de sus proveedores, con los que ya acumula un retraso de pago de nueve meses de media. 

Los colaboradores del alcalde admiten que está "harto" y "enfadado" por las medidas económicas del Gobierno que, aseguran, están asfixiando sus cuentas. A la negativa del Ejecutivo a que la capital pueda refinanciar su deuda de 7.134 millones de euros se añadió el reconocimiento de Zapatero de que el Gobierno no abriría la línea de crédito ICO que reclaman los municipios -y que está contemplada en la recién aprobada ley de morosidad- para poder asumir las deudas con sus proveedores anteriores al 30 de abril de 2010. 

"Lo que le pasa a Zapatero es que está profundamente envidioso porque cuando a él le preguntan qué ha hecho por la ciudad de Madrid no tiene respuesta, porque no ha hecho nada. Y no solo no hace nada, sino que pretende que nosotros no sigamos haciendo cosas. Y esa es la razón para negar la refinanciación de nuestra deuda", criticó Gallardón tras la junta de Gobierno. 

"Zapatero [que dijo el pasado martes en el Senado que había que "decirle al Ayuntamiento de Madrid que no se endeude más"] mintió. Desde luego, el Ministerio de Economía y Hacienda sabe que eso es falso y que vamos a reducir nuestra deuda". 

Gallardón reiteró su amenaza de dejar de pagar el alumbrado de la M-40 y extendió el desafío al resto de obras de titularidad estatal. "Nosotros a este envidioso, falso y obstaculizador Gobierno para los madrileños no le vamos a seguir pagando el mantenimiento de sus infraestructuras", zanjó el alcalde. 

Tras el desahogo del regidor, Jaime Lissavetzky se manifestó por primera vez como candidato socialista a la alcaldía. "Yo puedo entender que haya discrepancias en temas de financiación, pero una descalificación general no es creíble", dijo sorprendido por los "insultos" de Gallardón. "El Plan E ha supuesto para Madrid 900 millones de euros en dos años", le replicó el todavía secretario de Estado para el Deporte. 

(www.elpais.com, 08/10/10)

GALLARDÓN GASTARÁ 3.000 EUROS DIARIOS EN LA LIMPIEZA DE SU ALCALDÍA DE CIBELES 

Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde del Ayuntamiento más endeudado de España, gastará en la reforma del Palacio de Cibeles, sede de la Alcaldía, 124 millones de euros. Cada día, a partir de marzo próximo, cuando esté terminado, costará al erario , sólo en limpieza y pequeñas reparaciones, 3.000 euros al mes. Eso sí, lleva sin pagar los servicios de limpieza de la capital desde 2009. 

El Gobierno de Gallardón aprobó la pasada semana un gasto de 1.068.785,33 euros para 2011. La sede de la Alcaldía costará 2.928,17 euros al día, de ese dinero, se destinará 2.354,9 euros a la limpieza.  

Además, el Gobierno municipal aprobó, en el mismo acuerdo, 61.402,20 euros específicos para el mantenimiento del edificio y las instalaciones del Palacio de Comunicaciones, para este mes de diciembre, en las mismas condiciones.  

El traslado de la Alcaldía de la Casa de la Villa al Palacio de Comunicaciones ha sido criticado por la oposición por entender que era innecesario y un gasto excesivo. El portavoz municipal de IU, Ángel Pérez, acusó al alcalde de despilfarrador y dijo que “todo gasto derivado de Cibeles nos parece suntuoso e innecesario” más aún con una crisis económica que paraliza dotaciones sociales y deportivas en los barrios, mucho más prioritarias”.  

El Gobierno de Gallardón ha anunciado el recorte de 1.041 millones, previsto ya para este año en los servicios sociales municipales (discapacitados, indigentes, escuelas infantiles, etc.) El consejero de Hacienda, Juan Bravo,  afirmó que se haría frente sólo a “lo prioritario”, y justificó que siguieran las reformas del Palacio de Cibeles, porque si se detuvieran, se perderían 150 empleos.  

Sin embargo, el Ayuntamiento de Madrid lleva sin pagar los servicios de la basura desde 2009, por su precaria situación financiera, lo que ha provocado que las empresas adjudicatarias no puedan pagar las nóminas de sus empleados, como ya han anunciado, y hayan renunciado a renovar sus contratos a los trabajadores eventuales. 

(www.elplural.com, 07/10/10) 

LOS MEDIOS AGUIRRISTAS VUELVEN A REPROCHAR A GALLARDÓN "EL DERROCHE" EN SU "CAPRICHO" DEL PALACIO DE CIBELES 

El último capítulo de las desavenencias entre Alberto Ruiz-Gallardón y Esperanza Aguirre se produjo cuando el alcalde lamentó que la presidenta estuviera dando oxígeno al Gobierno al enfrentarse con los sindicatos a las puertas de la huelga general.  

Los medios de la órbita de la presidenta regional no han tardado en reaccionar y han replicado a unas declaraciones en las que el alcalde justificaba el alto coste de la nueva sede de su Ayuntamiento en el Palacio de Cibeles, recordándole entre otras cosas que es un “derroche” en tiempos de crisis o un “capricho” personal. La propia presidenta regional ya tachó en su momento de “obrón” la transformación de la nueva sede consistorial, mostró su preferencia por la anterior y reclamó “austeridad” para los edificios públicos.  

Gallardón trato de justificar este jueves el elevado coste de las obras en el Palacio de Cibeles englobándolo en un gasto que redundará en beneficio de la ciudad, ya que la parte de los nuevos espacios habilitados en su interior se destinarán a actividades culturales. "La inversión en Conde Duque, en Matadero y en Cibeles, en los tres grandes contenedores culturales de la ciudad, tiene un retorno económico muy importante", aseguró el alcalde, para concluir que por tanto ese gasto era " un acierto".  

Pero la reacción del entorno mediático de Aguirre ante estas palabras no se ha hecho esperar, y es que le tenían ganas al alcalde después de las declaraciones a cuenta del enfrentamiento de la CAM con los sindicatos con las que dejó en evidencia a su compañera de partido.  

Medios de la órbita de la presidenta regional como Madridiario alertaban en sus ediciones de este viernes de “la costosa metamorfosis del Palacio de Cibeles”.  Especialmente duros con el alcalde se muestran en la web de Losantos, Libertad Digital, donde hablan de “millones derrochados” en la nueva sede consistorial.  

“Tras el formidable derroche, el alcalde se parapeta ahora en un supuesto uso cultural al que se dedicará parte del edificio”, apunta la web de Losantos, insistiendo que cultura y turismo no son sino “las pantallas” con las que el alcalde pretende tapar su “descomunal derroche”. “El capricho de Gallardón ha costado a los ciudadanos de Madrid más 500 millones de euros, concretamente la oposición municipal denuncia que ya se habrían gastado unos 536 millones”, advierten.  

En una entrevista reciente en la cadena SER, Aguirre ya tachó de “obrón” y de "barbaridad" la remodelación del Palacio de Cibeles y tuvo palabras de elogio para el edificio de siempre en la Plaza de la Villa. “Con la crisis que tenemos ahora quizá no se hubiera hecho, creo que ha costado una barbaridad”, apuntó sobre la nueva sede. A continuación se proclamó partidaria de la austeridad “y más en las oficinas públicas, el reflejo de cómo gestionamos el dinero de los contribuyentes”.  

Dentro del equipo municipal madrileño son conscientes de que puede ser difícil de entender ese fuerte gasto precisamente en estos tiempos de crisis y recortes, de hecho el Ayuntamiento está teniendo problemas de pagos.  

El concejal de Hacienda, Juan Bravo, justificó que el plan de recorte de su Ayuntamiento no afectara a 24 millones de euros adicionales con cargo al presupuesto para el Palacio de Cibeles amparándose en los puestos de trabajo que se habrían destruido con la paralización. En cualquier caso apuntó sobre el traslado de sede que "hoy no tomaríamos esa decisión" dado el actual contexto económico.  

(www.elplural.com, 25/09/10) 

GALLARDÓN NO PAGARÁ ESTE MES DE SEPTIEMBRE A JARDINEROS Y BASUREROS DE MADRID 

La deuda que arrastra Gallardón con sus proveedores, por falta de liquidez, se hace cada vez más insostenible. Muestra de ello es el impago que los trabajadores de las contratas de limpieza viaria, recogida de basuras y jardinería de la capital sufrirán este mes, pues no van a percibir la nómina correspondiente al mes de septiembre, según han revelado CCOO y UGT después de que la patronal del sector, Aselip (Asociación de Empresas de Limpieza Pública), se lo comunicara a ambas centrales. Los dos sindicatos han informado de que el motivo esgrimido por la patronal es la falta de liquidez económica provocada por la falta de pago del Ayuntamiento a las empresas desde hace 10 meses.  

Por su parte, UGT y Comisiones ya han dicho que no van a consentir este tipo de actuaciones y han advertido de que iniciarán los procesos judiciales y conflictos necesarios para revertir la situación. En sendos comunicados lamentan que, "una vez más, la cadena se rompe por el eslabón más débil", los trabajadores. Además, consideran "triste" y "penoso" que "las instituciones que manejan grandes cantidades de dinero público lo derrochen a su antojo y sean los trabajadores los que tienen que pagar las consecuencias de su despilfarro".  

Por último, ambos sindicatos subrayan que “estos trabajadores sufren los recortes que el Ayuntamiento ha implantado en todos los servicios, además de sufrir los nuevos impuestos, como la tasa de basura, y ahora además tienen que trabajar gratis porque no les quieren pagar sus nóminas, situación que puede provocar verdaderos dramas humanos".  

(www.elplural.com, 25/09/10) 

"SOMOS LOS TÍTERES DE LA PELEA ENTRE LAS EMPRESAS Y EL AYUNTAMIENTO" 

"La gente tiene miedo y un estrés acojonante". Esa frase resume la situación de los empleados de limpieza viaria y recogida de basuras que trabajan para las empresas concesionarias del Ayuntamiento de Madrid. La pronuncia Juan Antonio Verdugo, de 41 años, 20 de ellos en este trabajo. 

Desde que el pasado jueves la asociación de empresas de limpieza pública (Aselip) comunicó a los sindicatos que no podían asegurar la nómina del mes de septiembre, hay inquietud entre los empleados. Y enfado. "Es una injusticia. Nosotros estamos en medio de la pelea entre las empresas y el Ayuntamiento. Somos los títeres y nos están utilizando para presionar", se queja Juan Antonio. Él trabaja para FCC como conductor de un camión de recogida de basura. 

Iván Ortín, de 37 años, elige otro sustantivo: "Angustia". Es operario de limpieza viaria. Trabaja para una empresa distinta, Cespa. Pero la amenaza es la misma. "No tenemos ninguna garantía de poder cobrar en septiembre", cuenta. Ortín lleva 15 años trabajando en esto, y no recuerda nada parecido. "De lo que yo he vivido, es la crisis más gorda". 

La noticia llega en mal momento. Y es que, como explica Ortín, las condiciones de trabajo han empeorado desde que el Ayuntamiento anunciara en mayo que iba a renegociar a la baja los contratos con las empresas concesionarias. Un 15% menos. Unos 25 millones de euros de ahorro para las arcas municipales, que tienen otra traducción para los trabajadores. "Las condiciones son bastante peores. Se han ampliado las zonas de trabajo y no se han cubierto los puestos de la gente que se ha ido de vacaciones este verano". 

Resultado: "La gente se queja. Las calles están llenas de guarrería. Y lo malo es que los vecinos le echan la bronca al barrendero que encuentran en su barrio. Te cogen y te ponen verde, en vez de llamar al 010 y trasladar la queja al Ayuntamiento. Al que puedes le explicas lo que pasa. Y algunos te entienden, pero otros no".El otoño no ayuda a que la cosa mejore. "Cuando venga la recogida de la hoja y la campaña de Navidad no sé por dónde vamos a salir", cuenta Iván Ortín, operario de limpieza viaria. Para la hoja tendremos que hacer el trabajo que realizaban antes 30 o 40 trabajadores que este año no van a estar". 

Lo mismo piensa Juan Antonio Verdugo. "Estamos aguantando unas condiciones de trabajo exageradas". Y enumera: "Hay menos vehículos de recogida, menos mecánicos, la empresa está obligando a mucha gente a doblar turno, el trabajo es menos eficiente". Él conduce su camión de recogida de basura siete horas y 20 minutos al día, y comprueba que las cosas van a peor. Por ejemplo, en la recogida de residuos del contenedor amarillo. Antes era diaria. Ahora, "hay zonas en que se recogen 48 horas después de lo debido". Así, se encuentran todo tirado por el suelo, lo que ralentiza su trabajo. Y la gente se queja de la suciedad. Verdugo trabaja en Canillejas, pero las quejas llegan de todos los distritos. 

"Es la peor época para trabajar con el Ayuntamiento", reitera Jesús María Rodríguez, de 47 años, operario de mantenimiento de parques y jardines. "No se ha contratado a gente por vacaciones, las bajas y las jubilaciones no se cubren. Pero nosotros tenemos que seguir haciendo el mismo trabajo". Así que, si antes había que podar ocho árboles en un día, ahora solo pueden podar cuatro. Lo que también repercute en cómo lucen los jardines. 

Pero Rodríguez no se queja. Su empresa, Sufi, SA, les ha dicho que va a pagar este mes, que no habrá problemas. "Vamos a cobrar normalmente, ya han hecho las nóminas", cuenta este operario. Pero se tienta la ropa: "Otra cosa es que el mes que viene el problema sea nuestro, porque trabajamos para el mismo cliente, que es el Ayuntamiento". Y se acuerda del refrán de las barbas peladas y el vecino. 

El vecino es Iván Ortín, que cuenta el ambiente entre sus compañeros: "La gente está muy preocupada. Quien no tiene niños tiene una hipoteca. La situación es nueva, porque hasta ahora habíamos cobrado sin problemas las nóminas. Tienes que hablar con barrenderos muy mayores, que se remontan a los años ochenta para encontrar algo similar". Juan Antonio Verdugo prefiere no hacer predicciones: "Hasta el último día del mes hábil no vamos a saber si cobramos o no. Luego Dios dirá". Las nóminas se pagan normalmente el día 29 o 30. Así que quedan un par de días más de incertidumbre. 

¿Y si al final pasa lo peor y no llega el dinero a la cuenta? "Habrá concentraciones para presionar a la empresa", dice Juan Antonio. "Habrá una denuncia por impago de los sindicatos y concentraciones en el Ayuntamiento", afirma Iván. Quedan dos días de incertidumbre para saber si este mes cobrarán la nómina. De incertidumbre o de angustia. 

Tras el anuncio de las empresas de limpieza pública de que no aseguraban el pago de las nóminas de septiembre el pasado viernes, los sindicatos les pidieron una reunión para . No hubo respuesta. "Hemos esperado todo el día, pero no nos han contestado", coincidían Moisés Torres, de UGT, y Jesús Belvis, de CC OO. 

El vicealcalde, Manuel Cobo, aseguró  que el Ayuntamiento "acometerá todos los compromisos asumidos" en el pago de las empresas concesionarias y acusó al Ejecutivo central al afirmar que, si este hubiera activado la línea del Instituto de Crédito Oficial para que los Ayuntamientos paguen a sus proveedores, el problema estaría solucionado. 

(www.elpais.com, 28/09/10)

MÁS NOTICIAS

© Copyright. 1998 - 2011. www.losgenoveses.net. Ningún derecho reservado. Aquí es todo de gratis y sin comisiones
( Página diseñada para ver con Explorer 8 o superior  a 1024 x 768 píxeles )